El Señor que me dio esperanza

 

 

 

 

“Recuerda la palabra dada a tu siervo, en la cual me has hecho esperar. Esta es mi consuelo en mi aflicción, que tu palabra me ha dado vida” (Salmo 119:49-50).

 

 

Ahora hemos comenzado un nuevo año. Demos a todos un “¡Feliz Año Nuevo!” De todo corazón, deseo que cada miembro de nuestra iglesia, Victory Presbyterian Church, tenga un año lleno de más alegría y felicidad. Ya sabemos qué tipo de cosas sucederán en el mundo durante este nuevo año. Por eso, para muchas personas, el nuevo año no será necesariamente tan esperanzador. Más bien, al comenzar el año, hay muchos que estarán preocupados y ansiosos, preguntándose cómo podrán sobrevivir este año. Para ellos, el nuevo año podría convertirse más en un año de desesperanza y desaliento que en un año lleno de esperanza.

Sin embargo, tú y yo debemos poner nuestra esperanza en el Señor al comenzar este nuevo año. La razón es que, aunque puedan llegar dificultades económicas a nuestras vidas en este nuevo año, el Señor nos dará esperanza.

En el Salmo 119:49, vemos que el salmista confiesa: "Tú me has dado esperanza". El Señor no solo dio esperanza al salmista, sino también a ti y a mí. ¿Cómo nos ha dado el Señor esperanza? Precisamente a través de la palabra de la promesa. En la Biblia, hay innumerables promesas de Dios. Entre ellas, cada uno de nosotros tiene una promesa que sostiene firmemente. Para nuestra iglesia, Victory Presbyterian Church, la promesa que abrazamos es Mateo 16:18: “…yo edificaré mi iglesia”. Al pensar en esta promesa, como el salmista lo hace en el versículo 50, yo también puedo confesar: "Esta palabra es mi consuelo en mi aflicción, porque tu palabra me ha dado vida". Al meditar sobre la promesa de que el Señor edificará Su iglesia, Victory Presbyterian Church, aunque mi corazón esté angustiado o preocupado, encuentro consuelo. Es decir, al contemplar la fidelidad de Dios en Su promesa, esa palabra restaura y revive mi alma desanimada y abatida.

Al comenzar este nuevo año, oro para que el Señor les haga más firmes y sólidos. También oro para que, tal como el Señor lo ha prometido, Él fortalezca aún más sus hogares. Además, oro para que el Señor haga aún más sólida nuestra iglesia, Victory Presbyterian Church, en este nuevo año. Aunque los medios de comunicación dicen que este será un año económicamente más difícil para todo el mundo, espero que, aun en medio de las dificultades, los miembros de Victory podamos aferrarnos a la palabra de la promesa del Señor con fe, y encontrar esperanza. Sea cual sea la dificultad o adversidad que venga en este nuevo año, recordemos las promesas del Señor y busquemos consuelo en ellas (v. 52). Que la palabra de la promesa del Señor dé vida a nuestras almas, nos renueve y nos avive, y que este año experimentemos abundantemente Su obra.

 

 

 

Con esperanza en el Señor,

 

 

Pastor James Kim

[Recordando las palabras: "Gozaos en la esperanza" (Romanos 12:12)]